La boda de Samantha Duckert y Kendel Clark no fue una boda al uso. El pasado 9 de septiembre, la joven pareja contrajo matrimonio en Mason City, en el estado estadounidense de Iowa.
Cuando la novia caminó por el pasillo para encontrarse con su futuro marido, no lo hizo con el tradicional ramo de flores en las manos, sino que llevaba un cachorro. Una iniciativa para promover la adopción de perros.
“Originalmente quería llevar a mis tres perros pero decidí que ya tenían amor y una casa, así que quería ayudar a rescatar a los canes”, señala Samantha a Huffington Post.
Tanto ella como las damas de honor llevaron en el enlace siete cachorros Chiweenies –una mezcla de chihuahuas y dachshunds- y ya han recibido miles de peticiones, después de que las fotos se hicieran virales, para adoptarles.