Los familiares de residentes han convocado una manifestación, en Madrid, para exigir condiciones dignas para sus mayores. Piden más recursos, una mejor atención. Y sobre todo, un modelo más humano de residencia. El caso es que existen alternativas a estos centros, como el 'cohousing' comunitario, aunque de momento son algo minoritario. En 'Cuatro al día' hemos visitado uno de los proyectos pioneros para saber en qué consiste.
En este centro, unos dan clases de taichí a sus propios compañeros, otros se encargan del huerto o de preparar el comedor, organizan talleres de todo tipo ya que es un modelo de autogestión.
En estos centros, los propios socios fijan las normas y colaboran en las tareas, todo se vota, se decide por mayoría. Comparten zonas comunes y cada uno tiene su apartamento privado. El 'cohousing' comunitario en cooperativa. Los requisitos para entrar es tener entre 50 y 70 años y estar bien de salud.
Prado es la más joven, el socio más veterano tiene 91 años. En total son 81 residentes, cada uno aporta un capital, 150.000 euros, más una cuota mensual 1500 euros por pareja, 1300 para los solteros. Muchos de ellos aseguran que este modelo de vida no es para ricos y que tan solo "hay que vender la casa".
Si un socio quiere irse recupera la inversión inicial, si fallece pasa a sus herederos y la propiedad no puede ni venderse, ni alquilarse. La idea es formar una comunidad.
A 60 kilómetros de Madrid, es uno de los centros pioneros en España, una fórmula colaborativa hasta ahora minoritaria. El plan Estatal de Vivienda plantea subvencionar hasta el 50% de la inversión en proyectos de este tipo, el modelo alternativo a las residencias podría crecer en los próximos años.