En declaraciones a la Cope, Arias Cañete ha defendido que el Gobierno de Mariano Rajoy "no se merece un castigo" porque "ha evitado el rescate" y ha sacado a España de las "consecuencias de una irresponsable gestión" por parte del anterior Gobierno socialista que, según ha dicho, dejó un "desfase" de ingresos y gastos "difícil de creer" y que "hacía imposible el mantenimiento del estado del bienestar".
Estos dos argumentos --la importancia de la Eurocámara y la defensa de la gestión del Gobierno-- son los ejes de la campaña del candidato para intentar convencer a quienes votaron al PP en las últimas generales y ahora se inclinan por la abstención.
El candidato dice no se haber si ha habido un "efecto Cañete" en las encuestas pero ha asegurado que su campaña está siendo "muy emotiva" y que los ciudadanos acuden a sus actos "en masa".
De hecho, ha insistido en que los "sacrificios" que han hecho los españoles empiezan a dar resultados, porque se ha "vuelto a la creaicón de empleo y el crecimiento económico", no lo suficiente pero ya "en el buen camino".
Está convencido de que al final de la legislatura el PP habrá cumplido su programa, podrá "bajar los impuestos" y "terminar con muchísimos parados menos" que los que dejó el Gobierno del PSOE.
Además, Arias Cañete ha declarado que es "absolutamente un honor" que el expresidente del Gobierno, José María Aznar, vaya a presentarle hoy en un almuerzo informativo, haciendo un hueco en su agenda internacional, convencido de que hará aportaciones "muy interesantes" sobre Europa. "Yo tenía mucho interés en que participara en algún acto", ha asegurado.