Los toros de Dolores Aguirre han protagonizado un tercer encierro de San Fermín limpio, de una duración de 2:58 minutos. Ha sido el primer encierro en fin de semana, lo que ha hecho que mucha gente se acercara a Pamplona. La carrera ha dejado un herido por asta de toro y otros tres con traumatismos leves.
El primer parte médico de los servicios de la Cruz Roja ha indicado que ha habido tres personas atendidas. En concreto, un joven francés de 23 años ha recibido una cornada en la cara interna del muslo izquierdo en el tramo del callejón y ha sido trasladado al Hospital Virgen del Camino, según han informado los responsables de Urgencias a los periodistas en el Complejo Hospitalario de Navarra.
Además, un corredor ha sufrido una herida leve en la cara como consecuencia de una caída en el tramo de Telefónica y ha tenido que ser trasladado al ambulatorio Doctor San Martín.
Un tercer corredor ha sido derivado al Hospital de Navarra tras sufrir una herida en el tobillo derecho en el tramo del Ayuntamiento. Este mozo tiene 31 años y es vecino de Tenerife. Por último, un corredor ha sido trasladado al Hospital Virgen del Camino desde Santo Domingo con un traumatismo en la cara.
Por lo que se refiere a los heridos de los últimos días, sigue hospitalizado el australiano D.M, 25 años, intervenido en el quirófano de la plaza de toros el pasado día 8 de julio, tras ser empitonado en el muslo derecho.
También continúa en el hospital el vecino de Benavente (Zamora), J.N.A, 40 años, atendido en el primer encierro por una contusión torácica. El resto de los heridos en los dos primeros encierros han sido dados de alta.
La ganadería sevillana de Dolores Aguirre se sitúa entre las 11 más peligrosas de los encierros, con una media de cornadas por carrera de 1,09. La manada ha permanecido unida prácticamente todo el trayecto. Ha sido a lo largo de la calle Estafeta cuando se ha empezado a dividir. Los mozos tropezaban unos con otros debido a la multitud y varios de los animales se han quedado rezagados.
La ganadería sevillana de los Dolores Aguirre es una de las favoritas de los mozos por la peligrosidad y la emoción que entrañan. Tienen un promedio de un corneado por carrera. Los seis morlacos que han corrido el encierro este año pesan desde 530 kg a 605 kg. Nobles, de gran porte y de carrera agrupada, son un clásico en la Feria del Toro de Pamplona, una cita a la que han acudido en más de una decena de ocasiones. Su encierro más lento lo vivieron en 1980, con 4,58 minutos de duración.