West aseguró que no querían vender las primeras fotos de la niña y que pensó que el mejor sitio para enseñarlas era el programa de la madre de Kim.
"Todo eso que se ha hablado por las fotos del bebé, y sobre lo que te pueden pagar por la foto, o que si quieres ponerla en una revista... Y ni yo ni tu hija [Kim Kardashian] hemos intentado que nos pagasen por nada, no hemos intentado que las publicasen en una revista", explicó.
"Pensé que sería realmente genial traer una foto de North para el gran final de temporada de su abuela", indicó.
Según Us Weekly, de acuerdo con el público asistente al show pregrabado, Kanye mostró la foto de la bebé por un instante, para que no pudieran hacer fotos con los móviles. Pero lo cierto es que más tarde Kim Kardashian subió a su cuenta de Instagram la tierna instantánea.
En ella podemos ver a una pequeña niña con unos negros ojazos que mira sorprendida a la cámara, inmortalizando su bienvenida al mundo mediático, alargando su brazo quiere hacerse con la cámara. Y es que esa curiosidad ya le viene de familia.
De esta manera tanto Kim Kardashian como Kanye West quieren poner punto y final a todas las especulaciones acerca del precio que pondrían a las primeras fotografías de su hija.