Entre los estudios realizados por diversas universidades norteamericanas, los datos revelaron que aquellos hombres con el rostro más ancho, tienden a ser personas agresivas. También, pudieron confirmar que las mujeres prefieren a los varones con dichos rasgos, ya que está asociado a una mayor capacidad reproductiva.
Muchos científicos se sitúan en contra de estos estudios y aseguran que es una estigmatización, en muchos casos negativa, que puede afectar a los individuos en situaciones como entrevistas de trabajo o incluso hasta el los tribunales.
Según explica el portal BBC, un grupo de biólogos estudiaron los restos óseos de unas 5.000 personas de todas las épocas y todos los lugares del plantea. Rolando González-José, coordinador del proyecto, concluyó; “no existe relación alguna entre la forma de la cara y el comportamiento. Muchas investigaciones universitarias se basan en estudios pequeños que no alcanzan a ser representativos de la sociedad"
El mundo científico está dividido con este tema ya que muchos otros estudios afirman que sí existe la relación ente los rasgos faciales y la personalidad.