Adele ha sido la protagonista absoluta de los Premios Grammy que se han celebrado este domingo en el Staples Center de Los Ángeles. La británica se ha llevado cinco premios y ha protagonizado dos de los momentos de la noche, según informa 'Daily Mail'.
Mejor álbum, mejor grabación y mejor canción, son los premios que le ha arrebatado a la que era la otra gran favorita, Beyoncé, a la que dedicó unas bonitas palabras: "Beyoncé, te adoro, emocionas mi alma desde que tengo 17 años. Quiero que seas mi mamá".
La cosa no quedó ahí y es que al recibir el premio a mejor álbum, Adele rompió el gramófono. Pero no fue la única anécdota que protagonizó en la noche. La cantante se subió al escenario para rendir un tributo a George Michael con su canción 'Fastlove'.
En mitad de la canción, Adele paró la actuación porque se había equivocado. "Lo siento, la he cagado. Tenemos que parar. Perdón por decir un taco pero no puedo seguir así", unas palabras que desataron la ovación de los allí presentes.
OTRAS ANÉCDOTAS DE LA GALA
Rihanna protagonizó otra de las anécdotas de la gala. La cantante de Barbados fue pillada varias veces bebiendo de una petaca. Ella, con mucho humor, ha subido un vídeo a Instagram con el momento acompañado de las palabras: "Creo que es momento para otro trago".