"Cuatro ojos ven mejor que dos". Este proverbio podría ser útil en este estudio realizado por investigadores apoyados por voluntarios interesados en la ciencia. Gracias a esta colaboración mutua han logrado hallar un planeta que también dispondría de las condiciones óptimas para ser visitado.
Para hacer oficial este descubrimiento, ha sido presentado ante la Sociedad Astronómica Americana en Seattle y la revista especializada en temas astrales The Astronomical Journal.
Adina Feinstein, una de las responsables de esta localización y estudiante de la Universidad de Chicago, explicaba que se trata de un proceso "muy emocionante debido a cómo fue encontrado, su órbita templada y porque los planetas de este tamaño parecen ser relativamente poco comunes (más allá del sistema solar)".
K2-288Bb es el planeta recién encontrado y se encuentra a a unos 226 años luz de la Tierra. En cuanto a la dimensión, los investigadores han podido comprobar que duplicaría el tamaño de la Tierra y también estaría ubicado dentro de la zona apta de su estrella donde el rango de distancias orbitales indica la posible existencia de agua líquida en la superficie.
El origen de este proceso surge con los datos de la cuarta campaña de observación de la misión K2 del telescopio Kepler y, sobre todo, con la iniciativa conocida como Exoplanet Explorers, en la que se plantea a la población la posibilidad de participar en la búsqueda de posibles rastros que indiquen la presencia de un desconocido cuerpo celeste.
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