Además de la frase que ha trascendido sobre el momento en el que Ana Julia Quezada llevaba el cadáver de Gabriel en el maletero: “¿No querían un pez? Les voy a dar un pez por mis cojo***”, otra, dicha en el mismo momento por la acusada, ha llamado profundamente la atención. La asesina confesa se dijo a sí misma: “Tranquila, Ana, no vas a ir a la cárcel”, y lo sabemos ahora que las grabaciones de la Guardia Civil han salido a la luz.
Los efectivos de seguridad pusieron micrófonos en el vehículo de Ana Julia cuando pasó a ser sospechosa (tras el hallazgo de la famosa camiseta blanca), según ha explicado en la Audiencia Provincial de Almería el teniente que instruyó la investigación. “Se realizaron grabaciones en el interior de su coche gracias al micrófono con GPS instalado bajo autorización judicial en su interior”, que no había trascendido en el sumario hasta ahora. Según ha especificado, al margen de las expresiones ya conocidas y de que entra y sale varias veces "sacudiéndose las manos de tierra", se dijo a sí misma: "Tranquila Ana, que no vas a ir a la cárcel", ha declarado.
Con respecto a por qué no se registró "antes, durante los once días de búsqueda la finca de Rodalquilar, han trasladado que "por el mismo motivo que no se registró la casa de Las Hortichuelas con familiares pernoctando allí".
"Siempre buscamos a un niño vivo y ella alentaba que estaba vivo, raptado y que iba a aparecer", ha dicho y, para concluir, que su sensación es que la acusada "no esperaba que se produjera el mayor despliegue de búsqueda de una persona por instituciones del Estado y que tuviera la repercusión que tuvo". "La intensificación del impacto mediático y social retraso su idea y trastocó su plan", ha subrayado.