La jueza decretaba la pasada noche prisión provisional y sin fianza para Sergio Ruiz, la pareja de Dana Leonte, desaparecida en junio en Arenas. Está acusado de homicidio.
La Guardia Civil podría tener el arma con la que presuntamente pudo acabar con su vida, un palo que han encontrado en la entrada de la casa. También se han encontrado restos de sangre de ella en varias estancias de la casa y en el mono de trabajo de él, ante lo que el abogado alega que podrían deberse a cortes que ella misma se hizo al cortar jamón al lado de su pareja.
Estos indicios sumados al hallazgo del hueso que pertenece a Dana, según su hermano, y a las múltiples contradicciones de Sergio, son indicios suficientes para la Fiscalía y la jueza, para enviarle a prisión. Para su letrado, en el auto se habla de un testigo que vio como dos hombres secuestraban a Dana en una gasolinera pero los investigadores no han profundizado en esa hipótesis.
Por su parte, Sergio sigue negando los hechos e insistiendo en su inocencia, mientras asegura que la joven se marchó voluntariamente a Rumanía, agobiada por las deudas que tenía por sus negocios de hostelería. A Sergio se le ha retirado la patria potestad de la niña de ambos, y tiene una orden de alejamiento sobre la pequeña.