Han pasado veintisiete años desde que la desaparición y posterior muerte de tres niñas en Alcàsser sacudiera a todo un país. Hoy, Fernando García, padre de Miriam, regresa a un plató de televisión veinte años después de su última aparición y se entrevista con Iker Jiménez. Asegura que, a día de hoy, sigue sin saber qué le pasó a su hija y a sus amigas Toñi y Desirée: "No murieron en La Romana, las llevaron ya fallecidas a La Romana".
Fernando sostiene que los dos acusados fueron “dos personas que tuvieron que buscar para cubrir un expediente”. Es decir, no cree que “los dos acusados vieran a las niñas siquiera”. Él, desde el primer día, vio algo que no le cuadró y confiesa que en la actualidad sigue “sin creer en la versión oficial” del caso. “Sigo pensando que algún día todo se sabrá”, añade.
También se ha hablado durante la entrevista sobre Juan Ignacio Blanco (que ha fallecido este verano), la polémica cinta que supuestamente tenía el investigador y que aseguraba que era “su seguro de vida”, del documental de Netflix y de cómo terminó todo este revuelo mediático, pues Fernando y Juan Ignacio pasaron de tener a muchos de su lado a ser desprestigiados.