¿Qué salida tendrá una prostituta si le prohíben ejercer en la calle?

cuatro.com 26/05/2012 01:05

Hasta ahora, la Guardia Urbana avisaba a clientes y trabajadoras sexuales antes de multarlas, ahora la intención es eliminar ese preaviso. Actualmente, la disposición sanciona a prostitutas y clientes con multas de hasta 375 euros por el simple hecho de estar negociando servicios sexuales en lugares que estén a menos de 200 metros de centros educativos. La nueva ordenanza ampliaría la prohibición de prostitución a cualquier calle o lugar de la ciudad. Entre 1500 y 2200 euros es el precio de las sanciones, que hoy en Barcelona, consuman sexo en las calles de la ciudad condal. Las futuras medidas pretenderían endurecer las penas a los clientes hasta triplicar las multas. Muchos vecinos sufren desde sus casas el ejercicio de la prostitución en la vía pública. ¿Qué salida tendrá una prostituta si le prohíben ejercer en la calle?

Unas 30.000 mujeres ejercen la prostitución en toda Cataluña y hace unas semanas se manifestaron por el centro de la ciudad bajo el lema “Somos putas, queremos trabajar”.

Un tercio de las prostitutas que trabajan en Barcelona proceden de los países del este. Este es el caso de Madona, de 31 años “estoy metida en esto desde los 20 años y a pesar de la crisis sigo teniendo muchos clientes”.

Elena presume de ser la única mujer catalana que ejerce la prostitución en las calles del centro de ciudad. Empezó hace 25 años por necesidades económicas “y hoy estoy a favor de la prohibición, pero sin perjudicar a las mujeres”.

Pepi tiene 54 años, es viuda, tiene dos hijos y un nieto “y tengo una relación preciosa con mis hijos, pero ellos no pueden ayudarme y yo tampoco lo puedo dejar”. Pepi vive en un piso compartido y asegura no cobrar menos de 20 euros por servicio “me gusta más que me llamen lumi que puta”.

Las transexuales se concentran en los alrededores del Camp Nou, donde aseguran “las travestis cobran el doble por el mismo servicio. Es por el morbo”.

Vecinos y comerciantes de la ciudad están en contra de la prostitución callejera “hay gente que ya no pasa por estas calles y nuestros negocios se han hundido”. Pablo y Pepa son vecinos de Las Ramblas y se quejan del ruido y las molestias, “además antes eran auténticas señoras”.

Montse Neira acaba de escribir un libro sobre su vida dentro de la prostitución y arremete contra el proyecto del Ayuntamiento de Barcelona “estoy segura de que esta nueva ordenanza criminalizara a las prostitutas”.

María es ecuatoriana y tiene dos hijos en su país con los que habla por teléfono a diario. “Vine a cuidar niños y he acabado en la calle pero nadie de mi familia sabe que me dedico a esto”.

Prostitutas de Barcelona”, es un reportaje de Sandra Gonzalo.