¡Nos vamos de boda!

La boda se divide en dos partes: la ceremonia por la mañana y una recepción por la tarde, en total más de seis horas de celebración. En la ceremonia el padre de la novia ofrece la mano de su hija al novio. El fuego es el testigo de esta unión que está presente durante toda la boda. Primero se enciende el fuego y se echan en él ofrendas. Una vez que los novios están casados se intercambias sus collares de flores y darán tres vueltas alrededor del fuego unidos por sus dedos meñiques. Los anillos se ponen en el pie, donde solo pueden lucirlos las mujeres casadas. En la recepción los invitados, que suelen superar los mil, saludan a los novios uno a uno.