Los canales hacen a esta ciudad especial. "Todos los palacios en Venecia se mueven porque están construidos en fango....y por eso desde 1300 los materiales que se utilizan son flexibles", afirma Alejandro Suárez, un abogado que lleva 14 años sabáticos en esta ciudad. Alejandro recorre el Gran Canal mostrando las casas del compositor Wagner, el poeta Lord Byron o el actor Roger Moore.
Muchos habitantes en Venecia poseen magníficos palacios y villas con vistas al Gran Canal o construidos en las afueras. Como La Malcontenta, una villa del arquitecto del Cinquecento, Andrea Palladio, que nos enseña su dueño, el Conde Foscari. Un lujo al que solo ha tenido acceso la BBC y Callejeros Viajeros.
Además de millonarios, Venecia está plagado de estudiantes como Patricia, una au pair- cuidadora de niños a domicilio- que sabe sobrevivir con apenas 700 euros al mes en una de las ciudades más caras del mundo. "En Venecia hay que pagar por todo, hasta por ir al baño", dice Patricia.
"Venecianos apenas quedan 60.000 y el número sigue bajando", cuenta Italo, un funcionario veneciano no muy amigo de los turistas. "Desearía una "Atlántida" que acabara con todo", afirma medio en broma. Siete millones de turistas inundan la ciudad cada año y Manuel, un gaditano que se fue a Venecia por amor, cree que "la ciudad se convertirá en un museo submarino". Pero el agua alta sólo ocurre durante unos meses. "Se vuelve insoportable, los turistas se descalzan y no saben que es agua de mar y de alcantarilla" cuenta Mar Moya, abogada que nos habla también de la prostitución en la ciudad y del Consejo de los Diez, lo que sería para nosotros la Inquisición.
Ajena al agua, Venecia presume de historia y de tradición con el Carnaval, la Bienal de arte y arquitectura y la Mostra de cine, donde brilló por encima de todo un español en la alfombra roja: el modelo Jon Kortajarena.
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