La banda sonora de la ciudad la pone la llamada a la oración, suena por todas partes cinco veces al día. La ciudad que une Europa y Asia tiene el cuarto puente colgante más grande de todo el mundo. Cruza de lado a lado el Bósforo, cuyo nombre significa, literalmente "el lugar por donde pasó la vaca".
En la ciudad hay calles que tienen el metro cuadrado más caro que en la mismísima 5ª avenida de Nueva York. Porque también hay una Estambul de lujo: cincuenta mil de los hombres más ricos de todo el mundo se dejan querer en mansiones carísimas a orillas del mar de Mármara.
Mientras, ilegales, curdos y africanos, pasan desapercibidos en pintorescos barrios a tan sólo unos metros del centro. Aunque para los turistas, todos los caminos terminen en el Bazar.