Jenson Button, piloto de la Fórmula 1, acudió a cenar a un restaurante durante el Gran Premio de Australia de 2009 con su pareja Jessica Michibata y una serie de amigos. En un momento de la velada, el piloto británico acudió al servicio.
Ese momento, según cuenta Button en su autobiografía y recogen medios como ‘The Telegraph’, fue aprovechado por el multimillonario Richard Branson para sobrepasarse con su novia.
“El magnate, en estado de ebriedad, se acercó a su mesa y se sentó junto a Jessica. Deja de mirarme le dijo Branson sin que la modelo entendiese nada” ha escrito Button.
Cuando el piloto regresó a la mesa asegura que “me encontré a Branson tocando a mi mujer, con la mano en su rostro. Detente, es suficiente”. El multimillonario abandonó la mesa sin pronunciar palabra. Esta denuncia publicada de Button está recogida en su libro ‘La vida al límite’.