Análisis de Big Rumble Boxing Creed Champions: el espíritu de Rocky Balboa

  • Un arcade de boxeo muy divertido que te permite vivir toda la saga de películas de Rocky y Creed

  • Sube al cuadrilátero al ritmo de Eye of the Tiger y cuida ese gancho de derechas

El mundo del boxeo ha sido muy prolífico en el mundo de los videojuegos. Para encontrar sagas de renombre tendríamos que echarnos muchos años atrás para localizar algunas de la talla de Punch-Out! de Nintendo, que apareció en el año 1987 con una premisa totalmente arcade y desenfadada. Otra saga muy conocida en cuanto a este mundillo fue Ready 2 Rumble, prolífica en consolas PlayStation y Dreamcast y que finalmente también hizo una discreta aparición en Wii.

Fight Night Round y Fight Night Champion de EA Sports o el divertido FraBreaker fueron otras de las apuestas por este universo, que de una forma u otra quisieron aportar su granito de arena. Lo más cercano que tenemos al juego que os hablamos hoy es Ubisoft Rocky Balboa, lanzado en el año 2007 y basado en la película de su mismo nombre. Hoy vamos a ir un capítulo más allá y nos centraremos en el caso de Adonis Creed, hijo del conocido Apolo, quien combatió con Rocky Balboa y dando gratos recuerdos en las películas originales.

Big Rumble Boxing Creed Champions es una nueva apuesta por boxear con el mando de tu consola o PC, de la mano de Survios y Metro Goldwyn Mayer que a un precio competitivo trae una experiencia divertida y cargada de recuerdos.

Y más si os hablamos que muy pronto se cumplirá el 45 aniversario del estreno de la primera película de Rocky, interpretada por Silvester Stalone y que contaba las aventuras del Potro Italiano y sus primeros pinitos en el boxeo. Muchas de estas aventuras han pasado de padres a hijos, viendo cómo se enfrentaba a pesos pesados de la talla del propio Apolo, Clubber Lang encarnado por Laurence Tureaud (también conocido como Mr. T) o el malvado Ivan Drago. Todos estos tienen una cita en Big Rumble Boxing Creed Champions, un sencillo juego arcade en el que machacar botones de forma individual o acompañados.

El ojo del tigre

Como bien mencionábamos, muchos son los personajes que se dan cita en el ring de Big Rumble Boxing Creed Champions. Rocky Balboa, Apolo Creed, su hijo Adonis Creed, Clubber Lang, Ivan Drago, Viktor Drago (hijo del anterior), además de un sinfín de personajes secundarios e inventados completan un plantel que supera la doce de seleccionables. Todos ellos con sus conocidos movimientos y características que los convierten en avatares que seleccionar y probar para ver cual se adapta mejor a tus movimientos. Rocky, por ejemplo, era caracterizado por su buen juego de pies y su agilidad, algo que notaremos desde el primer momento que tomemos su control. Por otra parte, Ivan Drago es mucho más fuerte y lento, por lo que los golpes que logren ser encajados con este serán prácticamente fatales para el contrario. Adonis Creed es uno de los más novatos y por ende menos técnico, lo que se verá en unos movimientos ágiles, pero también más débiles.

Tenemos muchas historias y razones para meternos al cuadrilátero, algo que se comprueba desde el primer minuto en el que se comience la andadura en su modo Arcade donde se tendrán una serie de combates y se desgranará la historia de cada uno de estos personajes. Estas rememoran muchos de los momentos vividos en la gran cantidad de películas estrenadas en la gran pantalla, por lo que combatir con Eye of the Tiger de fondo hará subir la adrenalina a más de uno. Sin ir más lejos, Rocky Balboa tendrá que hacer frente a Apolo, Clubber Lang y Drago, al mismo tiempo que se han introducido otros combates inventados que extienden un poco más esta modalidad. Lo mismo ocurre con Adonis Creed, el cual ha protagonizado dos películas bajo el nombre de Creed y en cuyo camino se repasan sus mejores combates además de otros creados para la ocasión.

Plantel variopinto y cargado de estrellas

También se cuentan con otros personajes secundarios e incluso inventados que, si bien no aportan demasiado argumentalmente, ya que se cruzarán con los auténticos protagonistas, sí que proporcionan unas cuantas horas de juego más y diversión a puño limpio. La miga del título la encontramos a la hora de acceder al cuadrilatero, pudiendo desplazar lateralmente al personaje a través del pad o el stick y moverlo hacia el fondo o a nosotros para esquivar ataques. Se han tomado prestadas mecánicas como las que se han visto en clásicos del género como Tekken o Soul Calibur y esta adaptación pese a correcta tiene algún que otro fallo en la ecuación. Por otro lado, cada boxeador incorpora un golpe más débil con mayor velocidad y otro más fuerte pero que tarda algo más en ejecutarse. En este A, B y C de combate entra un aspecto importante, la defensa ante los golpes del rival para no caer noqueado.

A medida que se vayan encajando puñetazos al rival su barra de vitalidad descenderá, lo que le hará caer a la lona una vez esta haya finalizado. Una vez ocurra esto, se accederá a una secuencia en la que pulsar repetidas veces el botón para no ser eliminado tras la cuenta de diez. Otro punto interesante es que bajo la barra de vida se incorpora otra en la que se señaliza la defensa y que una vez acabada hará que el personaje quede mareado durante unos segundos, momento idóneo para atacar o encajar un golpe especial. Este último es un auténtico salvavidas durante una pelea, ejecutándolo en el momento preciso una vez se haya cargado a medida que se tengan movimientos certeros y que descargará una cadena de impactos al rival. Eso sí, siempre que sea encajado, ya que tarda unos segundos en ejecutarse y puede ser esquivado con un poco de maña.

De lleno en el cuadrilátero

La defensa es quizás también uno de los mejores ataques, por lo que no se debe olvidar nunca el hecho de cubrirse y esperar el momento idóneo para devolver un golpe o esquivarlo, dando unos segundos para agarrar e impactar un directo. Los combates en cuanto a personalización son bastante completos, definiendo datos como el número de caídas que pueden producirse una vez se es noqueado, el número y la duración de cada round. Esto es completamente disfrutable tanto en solitario como en multijugador local con dos jugadores, dando combates muy divertidos y entretenidos. A medida que en su modo arcade se disputen peleas, se irán desbloqueando nuevos boxeadores y al mismo tiempo atuendos alternativos que comúnmente se resumen en calzones de otros colores o basados en las películas. Para ensalzar un poco más a los nostálgicos se incorporan minijuegos con fases de entrenamiento en los que correr o golpear al saco, como no a ritmo de 'Eye of the Tiger'.

Algunas de las pegas las encontramos en la poca lógica que tienen algunos de los enfrentamientos, viendo como un Rocky totalmente joven se verá cara a cara con Adonis Creed. O situaciones ilógicas como luchar en plena calle con el calzón de boxeo contra un contrabandista o deudor. Cosas que no tienen una excesiva importancia, pero sí que en ocasiones restan algo de realismo al título. Por otra parte, el cuadrilátero es de unas dimensiones algo minúsculas y hace complicado poder esquivar los ataques del contrincante, algo que debería haber sido mejorado por la desarrolladora. Estar contra las cuerdas será algo común y que en tu contra será algo terrible, pero a tu favor también, dando unos combates que concluirán muy rápido.

En cuanto a los diseños de los personajes se ha optado por el realismo y que cumplen con creces, otorgando unos diseños trabajados y muy parecidos a los actores originales. El juego luce en consolas y PC a una tasa de imágenes por segundo muy fluida, así como unos efectos de luces, sombras y partículas correcto. En las piezas de su banda sonora se ha optado por la música hip hop con ritmos de todo tipo y que sumergen de lleno en la acción. Por otra parte, la melodía principal de la película de Rocky y Eye of the Tiger dan ese toque para aquellos nostálgicos. El título llega con un doblaje al inglés notable junto a textos de pantalla en castellano.

En definitiva

Poco más podemos decir de Big Rumble Boxing Creed Champions. Pocos son los videojuegos de boxeo que podemos jugar hoy en día y a falta de pan buenas son tortas, nunca mejor dicho. Un sencillo arcade que si bien dará unas cuantas horas de entretenimiento en solitario se ven incrementadas en su multijugador local. Echamos de menos que no se hayan introducido modalidades online para combatir con otros jugadores a través de internet, algo que habría aumentado aún más su duración. Un producto muy aconsejable para aquellos que busquen una experiencia sencilla, accesible y que embaucará sobre todo a los fanáticos de Rocky Balboa.