Sergiy Larionov lleva refugiado en un hotel de Kiev desde el pasado 24 de febrero. Los bombardeos rusos intentan hacer caer la ciudad, que se resiste a rendirse y sigue plantando cara al ejército de Putin, como en otras poblaciones de Ucrania.
Este ucraniano tiene una vinculación muy especial con España y tiene tatuada la bandera en el brazo, junto con el tradicional toro. Él mismo nos ha contado en ‘Todo es mentira’ su bonita historia de amor con España: “El tatuaje es un símbolo y un vínculo de conexión con España, sobre todo con Cantabria porque he pasado muchos veranos en Torrelavega, en una familia de acogida”.
Sergiy formaba parte de un programa mediante el cual niños ucranianos acudían los veranos a España para pasar las vacaciones. “Veníamos afectados de Chernóbil, huérfanos y niños que han perdido a uno de sus padres, que es mi caso. Teníamos una situación bastante difícil en la familia y así participé en este programa”, nos ha contado.
El primer año que vino fue en 1995 y desde entonces lo hizo durante 12 veranos seguidos: “Vivía con una familia española que me acogía y me daba todo su apoyo, ayuda, cariño y amor. Desde entonces tengo un amor muy especial por el país, por la gente de España, por Cantabria y por Torrelavega. Esta conexión la quiero tener siempre cerca”.