En 2029 saldrá de la cárcel la asesina del crimen de Cortegada: Su macabro plan para matar al hombre que conoció en una app de citas
Hace escasos 8 meses que tuvo lugar el juicio por el crimen de Cortegada (Orense), en el que una joven de 26 años acabó con la vida de un hombre de 54 años que había conocido a través de una app de citas. La mujer fue condenada a 8 años de prisión, un castigo menor al esperado por la delicada situación mental en la que se encuentra.
Su caso recuerda al del crimen de Badoo, en el que Josetxu fue enterrado con un ápice de vida por una mujer que conoció a través de Internet. José María llevaba hablando con Cristina durante todo el mes de agosto de 2021. La confianza virtual entre una y otro era plena, por lo que el hombre decidió que en algún momento tenía que producirse un encuentro físico. Y así ocurrió, pero con un trágico final.
El 20 de agosto de aquél año, la joven recogió al hombre en en Vigo -había viajado desde Barcelona- y lo llevó hasta su casa en O Rabiño, en Cortegada. Allí se produjo una tensa convivencia. José María y Cristina empezaron a discutir de seguido durante esos momentos. Al parecer, ella le invitó a marcharse de su hogar pero el otro rechazaba constantemente. Ella llegó a hacerle incluso un bizum para que comprarse el vuelo de vuelta, ya que José María le aseguró que no tenía dinero para el billete.
Pero en la noche del 23 de agosto, Cristina decidió matarlo después de las rogativas del catalán para que le diese una oportunidad más. La mujer le suministró una bebida en la que había echado grandes cantidades de un medicamento depresivo y otro hipnótico con el que podía dormirse. Una vez ya inconsciente, cogió un almohadón y terminó asfixiándolo hasta que perdió por completo la respiración. Así lo confirmó la propia asesina en el juicio.
Tras ello, ideó un macabro plan para deshacerse del cuerpo. Cristina lo sacó al jardín, donde plantó una hoguera para quemarlo. Una vecina se sorprendió por la humareda y le llamó la atención, por lo que tuvo que apagar el fuego. Ya en otra zona de la propiedad, más lejos de las casas colindantes, Cristina hizo una nueva leña y calcinó lo que quedaba de cadáver. Con una pala troceó los restos que quedaban.
Una visita al médico dio un giro de 360 grados en el caso
Un pie se salvó de las llamas, aunque la asesina lo enterró debajo de un olivo. Otras partes del cuerpo de José María se hallaron en las bolsas de plástico, en las inmediaciones de la vivienda y en el embalse de Frieira.
Tras no tener noticias del hombre, su madre decidió alertar de su desaparición, como podemos ver 'Código 10'. La Guardia Civil consiguió ubicar su teléfono móvil en Cortegada. En aquél momento se estaban realizando las pesquisas pertinentes, pero en diciembre de 2021 sucedió el hecho clave que arrojaría la luz a toda la historia.
Cristina acudió al médico y confesó al profesional que le atendió que decidió deshacerse del cuerpo de José María. Le dijo que lo había ocultado y que lo quemó en su finca. El médico, con obligación de denunciar, informó de los hechos la Guardia Civil. Los agentes encontraron los restos óseos del catalán en la propiedad de Cristina, que fue inmediatamente detenida.