Medellín, la ciudad que sigue matando por dinero

cuatro.com 22/03/2019 00:17

Pampliega ha podido entrevistar a un auténtico sicario que mata a gente por dinero desde hace unos 25 años. Aunque asegura que asesina "a gente que no tiene que estar en este mundo", reconoce que ha asesinado a amigos por dinero y que ya no siente nada al apretar un gatillo y quitarle la vida a alguien.

"No mato a mujeres ni a niños, lo odio. La primera vez que maté a alguien fue con doce años, a un hombre que iba a abusar de mí. La vida me ha conducido por este camino y no es una vida fácil", ha explicado.

Hablamos con uno de esos menores que matan por encargo a través de sicarios. Ellos son los pistoleros de las oficinas de cobro que operan en España y nos ha contado cómo y por qué mata a gente por dinero: "La mitad de lo que cobro y la otra mitad para mí. Me gustan mucho las armas y siento adrenalina al matar a gente. La primera vez que lo hice iba a cumplir 12 años", nos cuenta este adolescente que vive obsesionado con parecerse a los jefes de narcotraficantes que ve en televisión.

95% de los crímenes quedan sin resolver

Los impuestos de guerra fueron instaurados por el narco colombiano más famoso del mundo, Pablo Escobar. Medellín, su ciudad natal, se divide entre los que ven en él un héroe y los que le consideran un sanguinario asesino. Óscar Montoya, criminalista, nos explica cómo actúan los sicarios en Colombia: "Asesinan con mucha inteligencia. Se pasan días siguiendo a la víctima antes de dar el golpe final. En Colombia, el 95% de estos crímenes quedan sin resolver".