Los agricultores, en problemas: los jornaleros cambian el campo por el andamio

Durante la crisis el número de jornaleros se disparó, con muchas personas dispuestas a soportar las duras condiciones que impone el campo a cambio de un sueldo diario. Sin embargo, ahora la situación ha cambiado. Hay mucha cosecha por recolectar, pero poca gente para hacerlo.

Con la mejora de la economía otros sectores han crecido. Entre ellos, y especialmente, el de la construcción. Las obras y las grúas vuelven se han adueñado nuevamente del paisaje y son muchos los que han optado por dejar el campo para subirse a un andamio. “En la construcción se gana más. El campo es que es bastante duro”. “El nivel de sueldo del campo es muy mísero”, explican quienes han trabajado en estos sectores.

En estas circunstancias, los agricultores se encuentran en una situación complicada y ven cómo, después de un duro invierno, sus cosechas siguen en peligro si no hay nadie que las recoja.