En las entrañas de la Unidad Central de Radiofarmacia de Galicia: mientras duermes ellos preparan tus fármacos

En las entrañas de la Unidad Central de Radiofarmacia de Galicia: mientras duermes ellos preparan tus fármacos
Entramos en la Unidad Central de Radiofarmacia de Galicia. Imagen: Carlos López
  • Cada noche, mientras la mayoría duerme en la Unidad Central de Radiofarmacia de Galicia se trabaja a pleno rendimiento

  • El laboratorio tiene muchas medidas de seguridad, antes de salir hay que comprobar que no nos hemos contaminado.

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Cada noche, mientras la mayoría duerme en la Unidad Central de Radiofarmacia de Galicia se trabaja a pleno rendimiento, preparando medicamentos especiales que los pacientes recibirán en unas horas. Nuestra compañera Nuria Fresneda ha entrado en la fábrica que sostiene la medicina nuclear gallega.

Empiezan a trabajar a las 4 de la madrugada porque preparan medicamentos especialmente delicados. En algunos casos, desde que se elaboran hasta que se le administra al paciente no pueden pasar más de dos horas.

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Ximo Castillo, responsable Unidad Central Radiofarmacia de Galicia explica que ellos obtienen "dosis personalizadas para cada paciente".

Se suele relacionar medicina nuclear con cáncer, pero la radiofarmacia tiene muchos más usos. Como señala Castillo, "se usa para estudios pulmonares, cardíacos, también para enfermedades como Alzheimer o Parkinson".

Aquí no preparan los fármacos calculando los miligramos necesarios como suele ser habitual, sino el nivel de radiactividad que tendrá a una hora determinada. "Manipulamos mucho externamente con un joystick y siempre estamos con una compañera de apoyo para hacerlo entre dos porque es un proceso muy delicado" explica María Jesús Liste, técnica radiofarmacia, y luego "la dosis una vez cargada la cerramos en su blindaje de tulsteno".

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El laboratorio tiene muchas medidas de seguridad. Antes de salir hay que comprobar que no nos hemos contaminado. Sandra Bermúdez, técnica radiofarmacia confirma que "como último paso mido la tasa de radiación y con esto determinamos la categoría del bulto. Algunos llevan tulsteno, otros plomo y hierro…"

Una vez que están bien protegidos se distribuyen por todos los hospitales gallegos. Es el trabajo escondido que hay detrás de muchas medicinas que salvan vidas en los centros médicos.