A las 12.32 horas España se ha ido a negro. Un apagón generalizado ha dejado a la península en vilo a una hora en la que la afluencia en los transportes era muy alta. España entera se ha visto paralizada ante el corte de electricidad y energía, generando un caos en los transportes, sobre todo en los trenes y metro de grandes ciudades como Madrid. 

La demanda eléctrica se ha desplomado repentinamente pasando de casi 27.000 megavatios a cero en unos segundos. La circulación en las carreteras ha sido un descontrol por los cortes y la falta de semáforos, pero el trasporte público ha sido de lo peor parado. 

El apagón pillaba a miles de personas desplazándose en trenes o metro que han visto interrumpido su funcionamiento. Los ciudadanos se han visto atrapados en mitad del recorrido, en vagones sin luz y sin noticias del exterior a expensas de una evacuación. El panorama ha sido prácticamente apocalíptico en las estaciones: incertidumbre, linternas y gente caminando por las vías en busca de información y la superficie. 

Se ha descartado que el servicio de trenes de Media y Larga distancia vuelva a estar operativo hoy

En mitad de la oscuridad, según datos de RENFE, se han evacuado a más de 30.000 personas. Todos los servicios ferroviarios se han visto interrumpidos al quedar sin tensión las catenarias. El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha descartado que el servicio de trenes de Media y Larga distancia vuelva a estar operativo el día de hoy, pero confía en que los servicios de Cercanías se puedan reestablecer a las dos horas de recuperar el suministro eléctrico.  

Así lo ha anunciado en su cuenta de X: "Atención. En el día de hoy no es previsible que se recupere la circulación de trenes de Media y Larga distancia. Por ello todos los usuarios que tuvieran previsto un desplazamiento de estas características no podrán hacerlo". Además ha indicado que muchas estaciones mantendrán sus puertas abiertas durante la noche para acoger a todos los pasajeros afectados por el apagón. 

La ciudad de Madrid ha sido de las más colapsadas dada la afluencia de transportes

Las líneas de metro también han visto su servicio suspendido tras el apagón. En Madrid, la gente trataba de salir de las bocas de metro, confusos y en la penumbra. En la estación de Sol se ha realizado el desalojo a los veinte minutos del inicio del apagón, sumiendo a los pasajeros en el caos y la incertidumbre: “Vamos a perder el avión y no sé dónde vamos a pasar la noche”. 

En la estación de Atocha, las personas se acumulaban por decenas ante el inminente corte de suministro. La ciudad de Madrid ha sido una de las más afectadas: “No sé a quién dirigirme, mi hija dando a luz y vamos a perder el enlace”. El momento del apagón ha llevado a que la Gran Vía y Plaza de España colapsasen, obligando a los agentes de movilidad a regular el tráfico e intervenir en la zona. 

La situación en los aeropuertos de la península ha sido diferente

Centenares de vecinos se han acercado a las estaciones más próximas a ayudar y traer comida a las personas que se habían quedado desamparadas en mitad del caos. Algunos de ellos, auxiliados por la Guardia Civil, como en el caso de un tren detenido Zamora, del cual han conseguido evacuar a los 480 pasajeros. 

En los aeropuertos de la península la situación ha sido distinta. Gracias a la energía portada por sus electrogeneradores, muchos han podido seguir operando, pero con la capacidad reducida y registrando numerosos retrasos. 

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