Una cámara del portal de su vivienda la grabó cuando transportaba en varias bolsas y en una olla restos del cadáver de una amiga suya. La sospechosa, una jubilada rusa que responde al nombre de Tamara Samsonova, la habría descuartizado después de envenenarla. Los agentes han encontrado en su vivienda un diario en el que confiesa haber matado así a otras nueve personas.