Cuando pasaban unos minutos de las diez de la mañana daba comienzo el solemne funeral por el papa Francisco. El sencillo féretro, por expreso deseo del pontífice, ha sido trasladado por los sedirarios pontificios, ha ocupado el centro de la plaza de San Pedro del Vaticano en la que se han congregado cerca de 200.000 personas y líderes de 160 países. Según informa Aurelio Megía en el vídeo, el cardenal decano del colegio cardenalicio, Giovanni Battista Re, ha presidido la ceremonia y en su homilía ha destacado que el pontífice ha sido "un papa en medio de la gente, con el corazón abierto a todos". Además, el cardenal ha lanzado un mensaje a los líderes mundiales sentados en las primeras filas: “hay que construir puentes y no muros”, les ha dicho.

Con algunos minutos de retraso y entre fuertes medidas de seguridad ha comenzado el funeral del papa Francisco en la plaza de San Pedro del Vaticano. A la izquierda del altar se han situado las autoridades y a la derecha los cardenales.

El sencillo féretro de madera ha sido trasladado desde el interior de la basílica hasta la plaza a hombros de los sediarios piontificios, que son los laicos elegidos por Francisco para llevar sus restos durante su último viaje.

Según el Vaticano, alrededor de 50. 000 personas se han congregado en la Plaza de San Pedro y cerca de 150.000 en sus alrededores para seguir la misa de exequias que ha sido oficiada por el cardenal italiano, Giovanni Battista Re, decano del colegio cardenalicio.

En las primeras filas de la derecha se han situado los cardenales, entre los que está el futuro papa. En las filas de la izquierda se han colocado las autoridades y personalidades de 160 países, entre los que había unos 50 jefes de estado o de gobierno y una decena de soberanos reinantes, como los reyes de España, Felipe VI y Letizia. Los monarcas, solo separados por el presidente de Estonia, tenían a su derecha al presidente estadounidense Donad Trump y a su esposa Melania, que han acaparado gran parte de los objetivos de las cámaras durante el funeral.

En estas primeras filas de autoridades también hemos visto al presidente argentino Javier Milei, a la primera ministra italiana Giorgia Meloni o al presidente ucraniano Volodímir Zelenski, cerca del francés Enmanuel Macron. En representación de los Windsors ha asistido el príncipe Guillermo.

La misa de exequias se ha oficiado en latín e italiano, aunque también se han escuchado otros idiomas, entre los que también estaba el español.

Giovanni Battista Re elogia la vida del difunto papa

Durante la homilía, el cardenal Giovanni Battista Re elogió la vida del difunto papa y recordó el llamamiento de Francisco a "construir puentes en lugar de muros". Un guiño político durante el sermón teniendo en cuenta quien se encontraba en primera fila del funeral.

El cardenal ha ensalzado la figura del pontífice afirmando que "conservó su temperamento y su forma de liderazgo pastoral y enseguida dio la impronta de su fuerte personalidad en el gobierno de la Iglesia, estableciendo un contacto directo con las personas y las poblaciones, deseoso de estar cerca de todos, con una marcada atención a las personas en dificultad, gastándose sin medida, especialmente por los últimos de la tierra, los marginados. Ha sido un Papa en medio de la gente, con el corazón abierto a todos".

Además, ha destacado ante los presidentes de Ucrania y EEUU, Volodímir Zelenski y Donald Trump, que, "frente al estallido de tantas guerras, con horrores inhumanos e innumerables muertes y destrucciones", el papa Francisco "ha alzado incesantemente su voz implorando la paz" y "llamando a la sensatez, a la negociación honesta para encontrar posibles soluciones". En este momento, los asistentes al funeral han interrumpido la homilía unos segundos con aplausos.

"La guerra, dijo, es solo muerte de personas, destrucción de casas, hospitales y escuelas. La guerra siempre deja al mundo peor que antes, decía él. Siempre es una derrota, una dolorosa y trágica derrota para todos", ha insistido.

Tampoco han faltado alusiones a la preocupación de Francisco por los migrantes y su primer viaje a Lampedusa, así como la petición de que se derriben muros. "Construir puentes y no muros es una exhortación que él repitió muchas veces", ha añadido.

Agradecimiento a todas las muestras de estima

Re ha expresado su agradecimiento a todos los gobernantes que han acudido a Roma para expresar su afecto al Papa, y ha destacado que todas las muestras de estima que se han visto tras su muerte señalan "hasta qué punto el intenso pontificado del Papa Francisco ha tocado mentes y corazones".

Además, ha destacado que, "a pesar su fragilidad y sufrimiento", Francisco siguió trabajando "hasta el último día" de su vida.

Sobre su forma de gobernar la Iglesia, Re ha indicado que Francisco "conservó siempre su temperamento" y dio de inmediato "la impronta de su fuerte personalidad" instaurando el "contacto directo con personas y pueblos, deseoso de estar cerca de todos, con especial atención hacia las personas en dificultad, entregándose sin medida en particular por los últimos de la tierra, los marginados", ha insistido.

Además, ha puesto de relieve que fue "un Papa atento a lo nuevo que surgía en la sociedad y lo que el Espíritu Santo suscitaba en la Iglesia", con un "lenguaje rico en imágenes y metáforas", siempre buscando "iluminar con la sabiduría del Evangelio los problemas de este tiempo", ante los "desafíos" del "cambio de época".

En esta línea, ha remarcado asimismo su "gran espontaneidad y manera informal de dirigirse a todos, incluso a los alejados de la Iglesia", con mucha "calidez humana" y siendo "profundamente sensible a los dramas actuales", buscando "consolar".

"Su carisma de acogida y escucha, unido a un modo de comportarse propio de la sensibilidad de hoy, tocó los corazones, tratando de despertar las energías morales y espirituales", ha subrayado Re.

"Te pedimos que reces por nosotros"

Finalmente, tras hacer alusión al "recen por mí" que Francisco siempre pedía al final de sus discursos, el cardenal Re le ha devuelto la petición a Francisco. "Querido Papa Francisco, ahora te pedimos que reces por nosotros. Te pedimos que desde el cielo bendigas a la Iglesia, bendigas a Roma, bendigas al mundo entero. Como hiciste el domingo pasado desde el balcón de esta basílica en un último abrazo con todo el pueblo de Dios pero también con la humanidad que busca la verdad con corazón sincero y mantiene en alto la antorcha de la esperanza", ha concluido.

Una vez ha terminada la misa, la procesión de cardenales ha puesto el punto final a la ceremonia en la plaza de San Pedro y el féretro de Francisco ha comenzado su último viaje hasta la basílica de Santa María la Mayor.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.