El plan de paz para Ucrania de Trump no cuenta ni con Zelenski ni con la UE

Estados Unidos estaría presionando a Ucrania para que acepte un plan que solo parece beneficiar a Rusia.
Kallas resta importancia al plan de paz de EEUU para Ucrania y avisa que no saldrá adelante sin Kiev ni la UE.
Cuando murió Franco en 1975, nos preocupaba la guerra de Vietnam, que acababa de terminar. Hoy nos preocupa Ucrania, entre otras. Allí, los equipos de rescate siguen buscando desaparecidos en Ternópil. La impresionante imagen del edificio en que han muerto al menos 26 personas en el último ataque ruso la ha compartido el presidente ucraniano en X. Esta noche, todavía salía humo, mientras las grúas trabajaban en los pisos superiores arrasados por el bombardeo.

Y mientras siguen los bombardeos... Washington y Moscú preparan un plan para poner fin a la guerra. Un plan para Ucrania pero sin Ucrania y sin Europa. Un acuerdo de paz muy similar al de Gaza y con unas condiciones durísimas para Kiev, informa Lara Escudero.
Sin tregua en una guerra en la que Rusia y Estados Unidos negocian un plan de paz, según Financial Times. Un plan alineado con los intereses de Moscú, que implica la cesión a Rusia de todo el Donbás, incluidas zonas aún controladas por Kiev.
Vetaría a Ucrania la compra de armas que puedan alcanzar territorio ruso e implicaría la reducción a la mitad del Ejército ucraniano; la retirada de la clave asistencia militar estadounidense; el rechazo a la presencia de tropas extranjeras en suelo ucraniano y la imposición del ruso como idioma oficial en toda Ucrania. Concesiones que parecen ignorar las demandas del presidente Zelenski.
La UE convencida de que el plan no saldrá adelante
La jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, insiste: para que cualquier plan funcione, necesita el apoyo de ucranianos y europeos y ha defendido el rumbo europeo para aplicar más sanciones contra Moscú.
En rueda de prensa desde Bruselas tras la cita de Exteriores, la jefa de la diplomacia europea ha defendido el camino de la UE para seguir sancionando a Rusia, afirmando que los ministros europeos se mostraron "bastante firmes y tranquilos" con el plan que elabora Washington, a espaldas de europeos y ucranianos, y que supondría importante concesiones a Rusia para que Ucrania ceda territorio y recorte el tamaño de su Ejército, según han publicado distintos medios estadounidenses.
"Ya lo hemos visto en el pasado: los planes de paz no pueden funcionar si los europeos y los ucranianos no están de acuerdo en esto. Por eso centramos el debate de hoy en lo que estamos haciendo, en nuestros resultados", ha asegurado.
La ex primera ministra estonia ha insistido en su escepticismo con Rusia, afirmando que "si realmente desea la paz, aceptaría la oferta de alto el fuego incondicional" presentada el pasado mes de marzo. "Las conversaciones han fracasado porque Rusia no se compromete. La culpa es del agresor, no de la víctima y alentar al agresor generará más violencia", ha advertido.
Frente a los planes que prepara Washington, Kallas ha respondido que la iniciativa de la UE para Ucrania tiene solo dos pasos y pasa por elevar la presión contra Moscú y seguir apoyando a Kiev. Por ello, ha reclamado seguir trabajando para estrechar el cerco sobre la flota fantasma que emplea Rusia para sortear las sanciones europeas.
"Las sanciones a la flota fantasma están afectando a los ingresos de Rusia para financiar esta guerra. Ese es nuestro objetivo y por eso estamos aquí", ha indicado, al tiempo que ha defendido acuerdos con distintos Estados que ponen bandera a estos buques para poder abordar los buques. "Se trata de una forma legal que permite a un estado abordar y registrar un barco de otro país", ha dicho, apuntando que la UE prepara más sanciones para la flota clandestina rusa.
En cuanto al apoyo a Ucrania, la jefa de la diplomacia europea ha reivindicado que el préstamo de reparación de 140.000 millones de euros usando activos rusos congelados es "la mejor manera de apoyar la defensa de Ucrania". A juicio de Kallas, el tiempo "no juega a favor de Rusia" y respaldar a Kiev "cueste lo que cueste" resulta más barato en comparación con lo que supondría la victoria de Rusia en el conflicto.
Distintos ministros han criticado algunos aspectos del plan y reclamado un puesto para la UE en las negociaciones. Así, el titular polaco, Radoslaw Sikorski, ha criticado la imposición a Ucrania de reducir sus Fuerzas Armadas. "Espero que no sea la víctima la que tenga restricciones en su capacidad para defenderse, sino que sea el agresor cuyo potencial agresivo deba restringirse", ha señalado.
De lado de Francia, Jean-Noel Barrot ha advertido que "la paz no puede ser una capitulación" y ha defendido una paz "justa" que respete la soberanía ucraniana y no pueda ser cuestionada por futuras agresiones. Mientras que el ministro alemán, Johann Wadephul, ha pedido un alto el fuego como primer paso para negociar la paz en Ucrania. "Así se avanzará y también se podrá alcanzar una paz duradera. Eso es lo que nos interesa", ha expuesto.
Asimismo, el ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, se ha desmarcado del plan de paz tras reiterar que la UE debe participar en cualquier negociación que implique su seguridad y que el plan no puede hacerse "a espaldas" Kiev.
Aunque pese a los altibajos en la relación entre Trump y Putin, Estados Unidos estaría presionando a Ucrania para que acepte un plan que solo parece beneficiar a Rusia.

