Bacardí cerrará la planta de Mollet del Vallès

Así lo ha anunciado este martes el alcalde de la localidad, Josep Monràs, después de que hace más de una semana se lo comunicara el director general de la compañía de destilados, "en el mismo momento en que lo hizo a la plantilla", ha explicado.

Además, la firma cubana ha encargado la distribución a una empresa subcontratada para que realice toda la actividad logística, que hasta ahora se hacía desde la población vallesana.

Monràs ha señalado que tiene conocimiento de que Bacardí está haciendo "gestiones con otros operadores para que se puedan quedar" en la superficie que actualmente ocupa en el polígono de Can Magarola, pero ha matizado que desconoce de qué sector.

Ha recordado que hace un año la empresa aplicó un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectó a 82 trabajadores de los sectores de producción y embotellamiento para llevar estas actividades a la planta de Pessione (Italia): "Se consiguieron unas buenas condiciones", ha subrayado.

Entre otras medidas, se fijaron prejubilaciones a partir de los 53 años, mediante un convenio especial con la Seguridad Social que la empresa complementaría hasta los 63 años; y en referencia a las indemnizaciones se pactaron 45 días por año, con un máximo de 42 mensualidades, más una cantidad lineal de 1.065 euros por año trabajado.

El primer edil ha lamentado la marcha de Bacardí "después de dar el primer paso" en 2016, y ha expresado que igual que se produce una mala noticia, también hay una de buena, ya que hay otras empresas interesadas en instalarse en el municipio.

En este sentido, ha dicho que se trata "de una empresa tecnológica muy importante" que está valorando la posibilidad de si su modelo empresarial encaja físicamente en alguna estructura de la ciudad, pero ha remarcado que no hay nada cerrado, aunque ya se han celebrado reuniones y visitado algunos espacios.