Marta Egea 17 ABR 2025 - 10:00h.

MadridEn España, la Seguridad Social reconoce distintos grados de incapacidad laboral para proteger a aquellas personas que no pueden desempeñar su trabajo con normalidad a causa de un accidente o enfermedad. Uno de los niveles más altos de esta protección es la gran invalidez. Este es un reconocimiento que se concede a aquellos trabajadores que, además de no poder realizar ninguna actividad laboral, también necesitan asistencia de una tercera persona para llevar a cabo tareas esenciales de la vida cotidiana como puede ser asearse, vestirse, alimentarse o desplazarse.

Este reconocimiento no solo implica una pensión económica para poder garantizar la subsistencia del afectado, sino que también tiene un complemento adicional para que se puedan cubrir los gastos derivados de la necesidad de ayuda constante. Es una medida esencial dentro del sistema de prestaciones sociales que tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de quienes se encuentran en una situación de dependencia total.

La gran invalidez no se concede de manera automática. Requiere de un proceso administrativo y médico bastante riguroso. Es necesario que se cumplan con ciertos requisitos, también presentar la documentación adecuada y someterse a la evaluación del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). Este procedimiento puede cambiar dependiendo de si la incapacidad es a causa de una enfermedad común, un accidente laboral o una enfermedad profesional.

Cuáles son los requisitos para obtener la gran invalidez

Para poder acceder a la pensión por gran invalidez, es necesario cumplir con ciertos requisitos. Uno de ellos es que se dé una situación de incapacidad permanente absoluta. Esto es debido a que la gran invalidez sólo se concede a personas que ya han sido reconocidas con una incapacidad permanente absoluta y que, debido a pérdidas anatómicas o funcionales, precisan la asistencia de otra persona a diario para poder realizar las acciones más esenciales de la vida cotidiana.

Por otro lado, es imprescindible estar afiliado a la Seguridad Social y en situación de alta o asimilada al alta en el momento de producirse la contingencia que origina la gran invalidez.

También se debe tener un mínimo de cotización que va a depender de la edad del solicitante. En el caso de que sea menor de 31 años, debe haber cotizado al menos un tercio del tiempo transcurrido desde los 16 años hasta que se produce la incapacidad. Si es mayor de 31 años, se exigirá una cotización mínima de cinco años, de los cuales al menos una quinta parte debe haber producido en los diez años anteriores al hecho causante de la incapacidad.

Hay que destacar que cuando se produce esta incapacidad por un accidente laboral o enfermedad profesional no se exige un periodo mínimo de cotización. En el caso de que una persona no esté de alta también puede solicitar la gran invalidez causada por accidente no laboral o enfermedad común. En este caso, para que pueda serle otorgada, el trabajador debe tener cotizados un mínimo de 15 años, y 3 de estos años deben corresponder a los 10 años anteriores a la solicitud de gran incapacidad.

Cuál es el procedimiento para solicitar la gran invalidez

El proceso para obtener el reconocimiento de la gran invalidez requiere varios pasos. Lo primero es que el interesado debe presentar una solicitud formal ante el INSS. Esta solicitud puede llevarse a cabo de forma presencial en cualquiera de los Centros de Atención e Información de la Seguridad Social o a través de la sede electrónica de la Seguridad Social.

Se deben aportar informes médicos actualizados que acrediten la situación de incapacidad y la necesidad de asistencia de tercera persona. Además, se tendrá que llevar a cabo una evaluación médica por parte del equipo de valoración de Incapacidades, el cual determinará cuál es el grado de incapacidad que corresponde al solicitante.

Cuando se haya llevado a cabo la evaluación, el INSS procederá a emitir una resolución reconociendo o denegando la gran invalidez. Esta resolución será notificada al interesado, el cual podrá interponer las reclamaciones pertinentes en caso de no estar conforme con la decisión.

Cuál es la cuantía por gran invalidez

La pensión por gran invalidez consiste en el 100% de la base reguladora. A esta se añade un complemento que se va a destinar a remunerar a la persona que atiende al beneficiario. Este complemento se calcula sumando el 45% de la base mínima de cotización vigente en el momento del hecho causante y el 30% de la última base de cotización del trabajador.

Esta pensión es totalmente incompatible con el desempeño de cualquier actividad laboral. Sin embargo, sí que es compatible con otras prestaciones, como las que están destinadas a cubrir gastos derivados de la necesidad de asistencia de tercera persona.

Cuándo se revisa la situación de gran invalidez

Esta situación de gran invalidez puede ser revisada por agravación o mejoría del estado del pensionista. Estas revisiones pueden ser iniciadas de oficio por el INSS o puede solicitarlo el propio beneficiario.