Una emotiva historia es la de una joven estadounidense que perdió hace diez años a su padre y que, de alguna manera, ha podido estar con él. Y es que en uno de los días más importantes de su vida no podía faltar. Todo ha sido posible gracias a que el hombre que recibió su corazón en un trasplante la ha acompañado hasta el altar. Y es que Jeni decidió escribirle una carta contándole que se casaba y que si podía asistir a la boda. Un deseo que finalmente se ha cumplido.