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Madre de Mamen: "Una persona que te quiere no te hace esto en tu final"

telecinco.es
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Días después de uno de los programas más intensos que ha vivido ‘Mujeres y hombres’, Emma ha querido ver como terminó la tan esperadísima final de Mamen antes de hablar largo y tendido de todo lo sucedido.

Abel no entendía la reacción que habían tenido los padres de su tronista con él y no dudó, en ponerse en pie para preguntarles cual era su opinión sobre él. Los padres volvieron a repetirle que le tenía que dar igual la opinión que tuvieran de él, y Mamen no lo soportó más. La tronista rompió a llorar desconsoladamente y abandonó el plató. Su madre Mari Carmen, bajó las escaleras y salió corriendo detrás de ella, no podía ver a su hija rota de dolor y pidió que dejaran de grabarla. “No puedo más, esto es una tortura, yo me voy, me quito los tacones y me voy. Esto es una tortura, es una tortura, qué se callen. Llevó todo el programa con dolor de tripa. Callaros ¡Ya!”, gritaba entre lágrimas la tronista.

Al mismo tiempo desde la grada, su padre le pedía que se fuera sola del programa, y su madre aseguraba que ellos habían estado callados y había sido Abel el que no dejaba de hablar del tema. “¿Qué quiere? ¿Qué queréis? No puedo más, no como, me duele la tripa, llevo un programa de mierda”, “No, no, no y no, me quito los tacones y me voy”, repetía Mamen rota de dolor. Ante esta situación tan dolorosa, el padre de Mamen no dudó en bajar a hablar con su hija, y compartir la opinión de su esposa: “No elijas a nadie, vete sola”.

Y es que, los padres de Mamen tenían claro que ninguno de los tres pretendientes era bueno para su hija, y prefería que abandonara el plató sola antes de que siguiera sufriendo. Mamen no era capaz de razonar y solo repetía: “No me quieren, no me quiere”. “No te han dejado que sea tu día, no te das cuenta de que es el día de otro. Una persona que te quiere no te hace sufrir, no te hace esto en tu final. No es un hombre para ti. Valora a las personas por el corazón y no por un físico. Sé astuta…”, le aconsejaba Mari Carmen a su hija que no paraba de llorar.

Llegados a esta situación, Emma pidió a Mamen que se marchara para tranquilizarse y que cuando estuviera tranquila ella sería la que tomara la decisión. Incluso, le ofreció la posibilidad de volver a empezar su trono. La tronista ya no estaba, pero la situación seguía siendo muy, muy tensa. El padre de Mamen había llamado “hipócritas” a los pretendientes. Raúl Futbolines se quitó el micrófono y abandonó el plató, no soportaba más la situación, consideraba que los padres de Mamen estaban siendo muy injustos con su hija, y le habían estropeado la final. El padre de Mamen intentó contestarle pero no tuvo ocasión.

Una opinión que también compartía su hijo Raúl, quién se puso en pie y le preguntó al padre por qué no le gustaba para su hija, al mismo tiempo que le llamaba egoísta. Julián intentó explicar que no estaba siendo egoísta sino muy sincero. Pero, todo había sido tan dramático que nadie estaba dispuesto a entrar en razón, y la conversación se convirtió en un círculo sin salida. Ya no había tronista, pero la final no había terminado. Abel se puso en pie, pidió disculpas a los padres de Mamen si sentían que había hecho daño a su hija y abandonó el programa. Estaba dispuesto a estar con Mamen fuera del programa, pero dentro no aguantaba más. La final de Mamen no podía haber tenido un final peor.

Días después, Emma quiso saber como estaban los protagonistas. Abel estaba hundido y con ganas de que todo terminase todo, y sin ninguna intención de hablar con Mamen. Nico se sentía ofendido y volvió al plató con la condición de no volverse a encontrar con los padres de Mamen, y Raúl bastante desilusionada y con ganas de saber cómo estaba su tronista. Eso sí, todos los pretendientes y sus padres, tenían claro que la actuación de los padres de Mamen, no fue la correcta.

Minutos después, Abel cogió fuerzas y entró al plató dónde una grata sorpresa le estaba esperando. Su madre Ana, y sus tías estaban en el plató. La empresa para la que trabajan había hecho el esfuerzo de darlas el día libre, y sus compañeras habían hecho una colecta para que pudieran venir las tres. Abel estaba emocionadísimo y todo el plató, encantado con la educación y saber estar de su madre. Emma aseguró que la educación y la nobleza se demuestran en los malos momentos, y Ana lo demostró con creces el otro día.

El pretendiente estaba contentísimo y pidió a su madre que no juzgara a los padres de Mamen, porque la opinión de unos padres siempre es importante y ellos lo tenían que respetar. Emma lo había avisado varias veces, “Mamen lo está escuchando todo”, y efectivamente, Mamen decidió romper su silencio. “No doy crédito a todo lo que estoy escuchando”, aseguró la tronista por teléfono. Pero, no hubo tiempo para nada más, porque una vez más el programa se quedó sin tiempo.

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