Maestro albañil, pobre y con tres hijos, Alfred, Martha y Jonathan (a quien tiene que abandonar por falta de recursos al morir su madre), que sueña con construir una catedral. Comienza levantando la catedral de Kingsbridge, trabajo que heredará primero su hijo Alfred y finalmente su hijastro Jack.
Un hombre tenaz, que lucha por mantener su trabajo a toda costa y que lo sacrifica todo por su sueño, incluso a sí mismo, su amor y su familia. Tom es sobre todo artista, pero deberá aprender el arte de la política si quiere llevar a buen término su misión.