Los platos serán en este programa un elemento amoroso más, que intentarán facilitar las citas e involucrar de lleno los solteros con la que puede convertirse en su pareja para todo el tiempo que ambos quieran. En “A bocados” no faltarán las ensaladas, las alitas de pollo, el rabo de toro y hasta las pizzas, con platos caseros de lo más natural a propuestas precocinadas que denotarán cierta falta de tacto o miedo a no estar a la altura, según se mire.
En la cita de Rocío y Sergio las dudas sobre si el plato principal ha sido comprado o es casero sobrevolarán la cena, pero puede que al final eso sea lo menos importante para los dos. Ella tiene 33 años, es empresaria y una mujer decidida a la que le gusta buscar soluciones y no problemas. Su cita, Sergio, tiene 39 años, es comercial y si le viene algún problema siempre intenta solucionarlos de la mejor manera posible. El rabo de toro será uno de los platos que más dará que hablar en una cita en la que tan importante será el menú que ambos han llevado como los sentimientos que puede provocar una buena conversación.
A 'First Dates' también llegará Fredy, un conserje de 60 años que desde que se separó escribe poesía. Qué le parecerá este dato a Esther, su cita, es todo un misterio, porque a ella la poesía no le dice mucho. Pero si es en buena compañía y con una buena cena por delante, podría llegar a interesarle. La clave estará en si Fredy cocina mejor que escribe o viceversa. Pero no sólo se hablará de poesía en la cita de Esther y Fredy. El baile también estará muy presente en una velada que puede que se decida en un par de pasos bien dados.
Gala es otra de las solteras que esta noche entrará en 'First Dates' en busca del amor. Es estudiante y vegetariana, por eso en su cena no hay nada animal. O casi. Pero Fernando no sabe este dato y aunque por un momento se le pasó por la cabeza que su cita podría ser vegetariana, terminó por descartarlo y se decantó por un menú completo a base de carne. No faltarán las ensaladas, las alitas de pollo y hasta una pizza que, al parecer, sabe a gloria.
Amador es bombero y es rockero. Se considera muy fogoso y está convencido de que puede “entrenar” a Rosa, su cita, a la que podría venir muy bien esta ayuda porque está preparando oposiciones para policía. Además del entrenamiento, Amador también puede poner un poco de rock en la vida de Rosa y ella, sacar su espíritu aventurero. No en vano el sueño de Rosa sería viajar a Tanzania, aunque quizás Amador no tiene tan claro dónde está ese paraíso porque en su respuesta aludirá al demonio de Tasmania que tiene tatuado. Si a todo esto se le une la afición por la comida, quizás podamos estar ante una conquista por el estómago.
El arte fluirá en la cita de Carlos y Tania. Él es un apasionado de la interpretación y en esta cita llevará su afición a sus últimas consecuencias con un abanico de imitaciones de voz, gestos de cara incluidos. Por su parte, Tania es más cerebral y le gusta analizar a las personas y las situaciones. En los gustos culinarios tampoco encajarán a la perfección, ya que él ha preparado una ensalada de queso y el queso ella no lo puede soportar. En el postre el dilema está en quién ha lo ha comprado y quién lo habrá hecho en casa. Pero como en el amor lo importante es el menú completo y no sólo un ingrediente, la cita de Carlos y Tania puede tener un dulce final.