Sí, lo han conseguido... ¡Un wallabi come relajadamente a unos metros de ellos!

No solo Unai es un gran amante de la naturaleza, la pequeña Amaia también lo es. En esta ocasión ha sido la peque de la familia quien ha acompañado a su padre para buscar la mejor fotografía posible. Con mucha paciencia y sorteando obstáculos entre las rocas, padre e hija han logrado fotografiar a un wallabi que comía a unos metros de distancia de ellos. Unai en esta ocasión no ha podido presenciar el momento. Habrá más oportunidades, seguro.