Dolor y lágrimas en el funeral de Reyes en su pueblo, Utrera

  • El féretro llega en medio del más respetuoso silencio de sus vecinos

En una ceremonia más íntima la familia y amigos de José Antonio Reyes le despiden en un funeral en la Iglesia de Santa María de la Mesa, en Utrera, Sevilla. Cientos de vecinos arropan a la familia desde que anoche se instalara la capilla ardiente en el Ayuntamiento. La investigación apunta a un posible exceso de velocidad

El coche fúnebre con los restos mortales de Reyes han llegado a la iglesia de su pueblo, Utrera, en el más respetuoso de los silencios, solo roto con el aplauso de sus vecinos cuando el padre del futbolista ha entrado en la iglesia, apoyado en su familia y visiblemente afectado.

A la ceremonia, más íntima, solo asisten familia y amigos, además de personalidades como el presidente del Sevilla, José Castro.

Ayer 12.000 personas se despidieron del futbolista en la capilla ardiente instalado en el estado del Sevilla. Después la capilla se ha trasladado al Ayuntamiento de Utrera, donde ha permanecido abierta toda la noche para que sus vecinos pudieran despedirlo.

La investigación de la Guardia Civil apunta a que el coche de Reyes iba a 237 km/h en una carretera limitada a 120, según informa Mundo Deportivo. La rueda reventó y el futbolista perdió el control del vehículo estrellándose contra una obra a unos 200 metros de distancia.

El primo que iba con él y también falleció en el accidente fue enterrado ayer. El otro familiar permanece hospitalizado grave.