Búsqueda de Blanca Fernández Ochoa: Los rastros que marcaron los perros eran una “falsa alarma”

  • Durante la noche la han buscado con varios drones con infrarrojos

  • La familia sigue convencida de que sufrió un accidente

La familia Fernández Ochoa no pierde la esperanza a pesar de que los rastros que ayer marcaron los perros “eran una falsa alarma”. Durante la noche no se ha dejado de buscar a Blanca Fernández Ochoa, desaparecida el pasado 23 de agosto.

Los investigadores han confirmado que la mujer que aparece en la imagen de las cámaras de un supermercado de Pozuelo, Madrid, es Blanca Fernández Ochoa, que compra víveres para su excursión. Los agentes que llevan el caso de la medallista han explicado que no solo se la busca en la Sierra de Madrid.

Además, están analizando el móvil que Blanca dejó en su coche, hallado en un parking de la sierra madrileña.

La familia no pierde la esperanza. Siguen convencidos que Blanca sufrió un accidente. Están desbordados por el despliegue, sin precedentes.

Ayer los perros señalaron dos posibles rastros que han resultado ser “una falsa alarma”, según ha explicado una portavoz de la Guardia Civil. Durante la noche varios drones con cámaras infrarrojas y agentes de la benemérita no han parado de buscar. A primera hora de la mañana se han echado al monte, de nuevo, 300 agentes, acompañados de 100 voluntarios y los perros.