Santi fue agredido cuando, al parecer alguien le pidió un cigarrillo y él se lo negó. Hoy hemos sabido, según publica el diario El Correo, que murió por una hemorragia craneal consecuencia de la paliza.

Seis de los siete detenidos por estos hechos sucedidos el pasado fin de semana en San Sebastián están en prisión preventiva desde anoche, acusados de un delito de homicidio. El séptimo implicado está en libertad con cargo y con la obligación de comparecer periódicamente en los juzgados. Sus abogados aseguran que ninguno de ellos ha reconocido los hechos.

La policía sigue investigando qué paso exactamente. Según los testigos, entre ellos el hermano del menor fallecido, le pidieron un cigarrillo y él se negó a darlo. Fue entonces cuando lo agredieron brutalmente a las puertas de la discoteca cercana al Club Náutico de la ciudad. Otros amigos suyos resultaron heridos.