El juez manda a prisión inmediata a los tres integrantes de la manada de Collado Villalba

Los magistrados de la Sección 29 de la Audiencia de Madrid han coincidido con la posición de la Fiscalía de Madrid y la acusación particular que pedía el ingreso en prisión por la gravedad del delito y la posibilidad de fuga de los tres condenados, integrantes de la llamada 'manada de Collado Villalba.

Los tres jóvenes, que han sido condenados a penas de entre 14 y 15 años de cárcel por un delito de agresión sexual continuada cometido en la localidad madrileña se encuentran en los calabozos hasta que llegue la policía militar, tras finalizar la vistilla en la Audiencia Provincial de Madrid.

Los magistrados han deliberado sobre el ingreso en prisión inmediata para los condenados, solicitada por la Fiscalía y la abogada que representa a la víctima. Sendas partes han explicado que hay peligro de fuga ante las penas tan elevadas a las que han sido condenados.

Ricardo A.M.; el guardia civil Martín A. F. y Miguel Ángel C.O., militar de profesión, han sido condenados a penas de 15 años, los dos primeros, y a 14 el tercero, aunque sus defensas han recurrido. La Audiencia de Madrid, sin embargo, ha decidido no esperar a la decisión final del Tribunal Supremo para decretar su ingreso en el penitenciario.

En el juicio, los tres condenados, negaron la violación múltiple argumentando que fue una relación consentida por la víctima, quien propuso las relaciones sexuales con los tres por turnos. Sin embargo, la Sala sustentó su condena en la declaración de la víctima y en los informes psicológicos, que daban credibilidad a su relato. "Pensé que no salía viva", explicó la mujer en su declaración.

La Sala ha considerado que se cumplen los requisitos para su ingreso en prisión, pero sobre todo ha inclinado la balanza el hecho de que las penas sean tan elevadas. Antes de ser informados, los abogados dudaban sobre la decisión final, ya que los condenados no han eludido la acción de la Justicia durante tres años.

Por ello, sus defensas han alegado que no existía riesgo de fuga, al igual que los otros requisitos como reiteración delictiva o entorpecimiento de la causa. Pese a ello, eran conscientes de que podría pesar 2la presión" que hay sobre el caso, según fuentes jurídicas de las defensas.