Hoy un hombre en Valga enterrará a su mujer y a sus dos hijas. Mientras, su asesino confeso, la expareja de su hija Sandra, ha pasado su primera noche en la cárcel. La policía investiga de dónde sacó el arma José Luis Abet con la que les disparó 15 tiros y para la que no tenía licencia.
"Hay que encontrar cómo lo ha adquirido y ver si ese revólver se ha utilizado en otras circunstancias y buscar cómo llegó a sus manos", ha explicado el subdelegado del Gobierno, Javier Losada. Con el revólver del calibre 32, Abet disparó 15 veces delante de sus hijos: cuatro contra Sandra, su exmujer, y su exsuegra, y tres contra su excuñada.
El arma fue hallada en el río, donde el asesino confeso dijo que la había tirado, junto con cuantiosa munición. Mientras él ha pasado su primera noche en prisión -sin fianza- acusado de tres asesinatos, su exsuegro afronta el entierro de su mujer y sus dos hijas en Pontevedra.
Los psicólogos designados por el juzgado deberán determinar ahora qué hacer con los hijos de Sandra y su asesino, de cuatro y siete años, testigos del crimen. Valorarán si el abuelo de los niños puede asumir su tutela.