La cantante de 23 años ha hablado sin tapujos sobre su oscuro pasado en una entrevista realizada por la revista ‘American Way’. Aunque ya muchos conocían sus problemas alimenticios y sus adicciones al alcohol y a las drogas, Demi Lovato ha querido contar cómo logró superarlo.

La joven cuenta en la entrevista que se recuerda a sí misma quejándose por su barriga cuando aún todavía llevaba pañales. Y es que, los problemas con la bulimia la acompañaron durante toda su infancia, ya que su madre mostraba algunos síntomas de este trastorno cuando ella tenía 2 o 3 años. También su abuela fue bulímica cuando era joven.

A medida que su preocupación por su peso crecía, Demi trataba de paliar sus preocupaciones con alcohol y cocaína. Sus adicciones fueron empeorándose hasta que un día llegó incluso a agredir a una de las bailarinas que le acompañaban en una gira, y se dio cuenta de que se le había ido de las manos. Apoyada por su familia, Demi entró en rehabilitación, donde le diagnosticaron bipolaridad.