Cuatro hermanas del norte del estado iban en la limusina accidentada. Era el cumpleaños de una de ellas, que acompañadas por sus esposos estaban entre las 20 personas que murieron cuando el conductor del vehículo pasó por alto una señal de stop y se estrelló contra otro coche.
"Se acababa de casar y su esposo le estaba dando una fiesta sorpresa de cumpleaños", contó la tía de las hermanas fallecidas, Barbara Douglas, con voz temblorosa mientras sus ojos se llenaban de lágrimas. Sus padres "están en shock", dijo la mujer al New York Post. "Somos lo que queda. Éramos siete, cinco hermanas y dos hermanos ".
La tía de otra familia, Valerie Abeling, contó al medio que los amigos habían alquilado un autobús, pero este se averió por lo que sustituyeron por una limusina. Finalmente el grupo, formado por varias parejas, entre ellas la de Axel Steenburg y Amy Dunlop-Johnson, se dirigía a una cervecería en Cooperstown, abordo del vehículo cuando ocurrió la tragedia.
Otra de las parejas de recién casados, era Erin Vertucci y Shane McGowan, de 34 y 30 años. "Estaban profundamente enamorados. Eran una pareja joven con toda la vida por delante", cuenta una pariente de Erin, a la que el dolor no le permite explicar qué pasó. "Es una tragedia horrible y no hay palabras para describir cómo nos sentimos".
Adam y Abby, otra de las parejas fallecidas. Tenían dos hijos: Archer, de cuatro años y Elle, una bebé de 16 meses, que se han quedado huérfanos en el accidente, el más mortífero desde 2009, cuando se desplomó un avión en Búfalo.
Algunas de las familias de los fallecidos han pedido colaboración en la web de Go Fund Me para poder enfrentar el coste de los funerales. Algunas han perdido a casi todos sus miembros.