La Policía de Pembroke Pines ha confirmado el fallecimiento del bebé. Asimismo, ha comunicado que recibieron una llamada de asistencia médica a las 17,00 horas del viernes de un aparcamiento en North University Drive.
El padre del niño, que fue quien alertó a Emergencias, dejó al pequeño en el asiento del coche, con el motor apagado y las ventanas cerradas, y se fue a trabajar, según ha indicado la misma fuente a Miami Herald CBS4.
Al finalizar su jornada laboral, el hombre se percató de lo ocurrido y llamó a Emergencias, quienes tras practicarle RCP, solo pudieron confirmar su fallecimiento.
Las autoridades recuerdan el peligro de dejar a los niños y mascotas en el interior de los vehículos y piden extremar las precauciones ya que las temperaturas en Florida alcanzan estos días los 30 grados.
Por su parte, la investigación continúa abierta y no se han presentado cargos contra los padres del pequeño.