Según los investigadores, sería él quien habría proporcionado a Desireé Mariotini la dosis letal de narcóticos compuesta, según el diario italiano La Reppublica, por pastillas tranquilizantes y otros estupefacientes.

La Policía de San Lorenzo, que detuvo a Marco Mancini como responsable de la venta de cocaína, heroína y psicotrópicos en el edificio en el que murió Desirée Mariottini, halló entre sus pertenencias 12 dosis de estos estupefacientes.

El mismo diario informa que se espera que los resultados del ADN extraído de muestras biológicas del cuerpo de Desirée desvele cuántos hombres la violaron durante las horas en las que la joven perdió su capacidad de reacción.

En el expediente del Juez instructor sobre el homicidio de Desirée Mariottini, consta que fue violada y dejada morir en un edificio deshabitado en Roma.

La adolescente, en crisis de abstinencia, habría acudido al inmueble para proveerse de droga, pero fue engañada por un grupo de hombres que le hicieron creer que iba a consumir metadona, cuando en realidad le suministraron un cóctel "mortal" de pastillas tranquilizantes y otras drogas, según el periódico italiano.

Según un testigo, alrededor de la joven tumbada en el suelo había alrededor de siete u ocho hombres. Este ha contado que le dio agua y azúcar, pero no pudo pedir ayuda, porque fue amenazado por el resto, que dejó morir a Desirée Mariottini.

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