El gobierno de la ciudad Huangshi, en el centro de China, ha dado a conocer que a partir del próximo año las familias allí residentes solo podrán tener un perro por familia, según informó el portal de noticias Caixin.
La política también prohibirá a los perros grandes, especialmente a aquellos perros midan más de 45 centímetros, o los considerados como "perros peligrosos", como los molossers y los bulldogs.
Las autoridades locales aseguran que esta medida busca "proteger la salud y seguridad de los ciudadanos", debido al elevado número de casos de perros que han atacado a humanos.
De hecho, esta no es la primera ciudad china que toma este tipo de medidas restrictivas hacia los perros. La capital de Hunan, Changsha, implementó una normativa similar este año. Las localidades de Chengdu y Hangzhou, han optado por limitar la posesión de perros a una reducida lista de razas permitidas.
En Pekín se instauró una ley así en 2006 cuando se percataron de que la rabia era la causa de la mayoría de las muertes ese año. También Shanghái introdujo este tipo de restricciones en 2011.