Numerosos testigos han declarado que la Policía sometió por la fuerza a Gray, quien murió una semana después de su arresto por numerosas heridas, entre ellas la ruptura de la columna vertebral.
Los investigadores de la Policía, sin embargo, han centrado sus pesquisas en lo sucedido en el interior del furgón.
El furgón realizó varias paradas antes de llegar a la comisaría del distrito oeste de Baltimore. Para ese momento, Gray estaba inconsciente y fue enviado a un hospital, donde convaleció hasta su fallecimiento.
De momento, la Policía ha reconocido que los oficiales encargados del traslado cometieron dos negligencias: ni abrocharon el cinturón de Gray, ni le proporcionaron ayuda cuando este la pidió.
Uno de los detenidos que le acompañaba en el furgón declaró en un primer momento que Gray estaba intentando autoinfligirse el daño, pero después se retractó de su testimonio.
Ahora queda en manos de la fiscal del estado, Marilyn Mosby, la presentación de cargos contra los seis agentes responsables de la detención de Gray, que ahora mismo se encuentran suspendidos de empleo pero no de sueldo.