Desde que el pasado jueves, Michael Jackson dejaba este mundo, miles de seguidores del ya leyenda del pop han seguido paso a paso los últimos datos de su muerte. Nada está muy claro todavía. Este pasado sábado se hacían públicos los datos de la autopsia que lo único que revelaban es que no había habido violencia.
La familia no se queda tranquila con los datos que se han hecho público y, según medios estadounidenses, han ordenado su propia autopsia independiente. Es decir, que los más cercanos al mayor icono de la música pop quiere una segunda autopsia, después de que la oficial fuese realizada el viernes. Todo esto en medio de informaciones sobre la posible dependencia del cantante de medicamentos.
Por otro lado, la policía de Los Ángeles ha interrogado nuevamente al médico de Michael Jackson, Conrad Murray. El médico personal de Jackson, quien estaba con el cantante cuando éste se desmayó este pasado jueves en su mansión, ha contratado a un abogado para que lo acompañe a la que se espera sea una larga reunión con el Departamento de Policía de Los Ángeles.
Sin datos esclarecedores
Según los últimos datos publicados en medios estadounidenses, Jackson recibió una inyección del calmante Demerol poco antes de que le diera el paro cardiaco y cuando los servicios médicos llegaban al lugar de los hechos, Murray intentaba desesperadamente revivir al cantante. Finalmente los servicios de urgencia le trasladaban al hospital donde finalmente se confirmó su muerte.
Los exámenes médicos realizados al día siguiente no desvelaron grandes datos y no lograron determinar qué es lo que mató a Jackson, aunque existen unos exámenes toxicológicos pendientes que podrían tardar incluso hasta seis semanas. Se espera saber con estos exámenes si había drogas en sui sistema.
El dolor de su familia
Por su parte, también la familia habría enviado furgonetas para vaciar la casa de su hijo en el acomodado vecindario de Holmby Hills, preocupado por si roban algunos artículos. La hermana menor del cantante, Janet, pasó varias horas en la propiedad.
Los padres y hermanos de Jackson y los tres niños pequeños se mantenían alejados de las cámaras en una propiedad de la familia en el suburbio de Encino, en Los Angeles. El cuerpo de Jackson se mantiene en una morgue no revelada, después de que el forense lo devolviera a la familia en la tarde del viernes. No se han anunciado los planes de su funeral.