Crystal Renn conquistó la fama mundial por ser musa de las grandes firmas con una talla 42. La modelo, que se convirtió en abanderada de la defensa de las mujeres XL parece que ha traicionado sus propios principios, ha cambiado su cuerpo y es una de las protagonistas de la edición de trajes de baño de Sport Illustrated con una figura muy diferente a la que defendía.
Según publica la revista People, Crystal asegura que no es la más delgada de las modelos que han posado para Sport Illustrated y que "ya no siente ninguna presión para cambiar".
"Sport Illustrated se asegura de que las modelos son saludables", explica la modelo en la revista, "no les interesan las modelos más delgadas, les interesan las mujeres, todas tenemos cuerpos diferentes y no hay un cuerpo ideal".
La modelo, que pasó de usar una talla 42 a sufrir anorexia, afirma que ha encontrado la estabilidad en la forma de ver su figura, "me siento cómoda con mi cuerpo".