Ocurrió dos noches antes de que se produjera el enlace, aquel 22 de mayo del año 2004. Felipe y Letizia estaban a punto de contraer matrimonio y el sucesor de la Corona en aquel momento llamó a Pilar para confesarle lo feliz que era al poder casarse por amor con Letizia. Le contó, además, que antes de dar el paso, obtuvo la aprobación de todo su entorno y la periodista le pregunto, ¿y si los reyes se hubieran interpuesto en esta relación? “Entonces habría renunciado a Letizia, aunque se hubiese abierto la tierra a mis pies”, fue la respuesta que el príncipe le dio.