Que difícil es empezar un post en un blog dedicado al running para hablar sobre la instalación de unos urinarios públicos pero la ocasión merece la pena porque por fin la madrileña Casa de Campo ha estrenado, o mejor dicho, ha recuperado la caseta de los baños situada junto al aparcamiento de la explanada del Lago.

A los que nos leáis de fuera de Madrid os parecerá menor pero seguro que me entienden a la perfección esa especie de “corredor meón” que hay en todo grupo de runners que nada más empezar a correr ya pide a sus compañeros que le esperen, (no me voy a extender más en las necesidades que suelen apremiar a los populares antes de correr). Y sobre todo las que compartirán conmigo la importancia de la noticia son las mujeres que cada domingo corren por la Casa de Campo y que cuando querían ir al baño solo tenían la opción de meterse en uno de los bares del Lago y tomar un café a desgana para no tener que pasar por delante del camarero, con la siempre violenta sensación de que te metes en la casa de otro, solo para orinar.

Los veteranos con trienios corriendo en este pulmón madrileño llevaban años pidiendo a gritos la instalación de unos urinarios públicos (o eso me parecía a mí). Pero la necesidad era mayor en los últimos años y tras el auge de este espacio que cada fin de semana se ha convertido en un multitudinario punto de encuentro al aire libre para hacer deporte, (los tiempos de la decadencia por la prostitución ya son historia, y como siempre los ciudadanos y el trabajo de aquellos que pidieron el cierre al tráfico ha dado sus frutos). Me atrevo a decir que no hay en España un parque donde una mañana de sábado o domingo se produzca una mayor concentración de corredores y ciclistas por metro cuadrado, como ocurre en la Casa de Campo.

Pues bien, hace dos semanas se han estrenado los citados aseos que hoy nos han servido de gran excusa en este post. No se de quien ha sido al autoría intelectual, ni tampoco lo que ha costado pero por fin el ayuntamiento se ha dado cuenta de que la Casa de Campo es, además de su mayor parque público, su mayor instalación deportiva al aire libre con sus 1.722,6 hectáreas, (un wiki dato : es cinco veces más grande que Central Park).

En su día critiqué al equipo de Carmena por continuar la política del anterior gobierno municipal y convertir la castellana en un “carreródromo” cada domingo. Me imagino que la alcaldesa no tendrá ni idea de lo que estamos hablando, (será parte de la junta de distrito de turno), tampoco tiene que saber de todo, en cualquier caso enhorabuena por la puesta en marcha de esta medida tan pequeña pero tan practica y necesaria. Y no solo para los deportistas sino para todas esas familias que cuando acuden a este parque, muchas con niños , ya no tendrán que meterse en un bar para cumplir con su urgencias.

Ahora solo queda ordenar las plazas de aparcamiento de la explanada junto al campo de futbol para que con un poco de sentido común se proveche bien el espacio. Si ya sé que lo de ir en coche y defender la casa de campo como un pulmón es incompatible.

Agustín Hernández