Estuvo en las ‘marchas de la dignidad’ con el resto de las personas de Zaragoza que acudieron, regresaban hacia los autobuses la gente comenzó a correr: “Parece que era una carga y de pronto unos antidisturbios me cogieron, me placaron, me pusieron las esposas y pasé detenida hasta el lunes por la tarde en Moratalaz”, explicaba. Según nos contaba, se le acusa de desórdenes, daños y atentado, por lo que le piden cuatro años de cárcel: “Me vi metida en una película que es de ciencia ficción”.

