La escucha, antídoto contra el acoso escolar: la mediación de alumnos del colegio madrileño San Gabriel para combatir el bullying
En el colegio madrileño San Gabriel, profesores y alumnos llevan 15 años practicando la mediación de conflictos para combatir el acoso
"El clima que se crea en el cole es de atención, de cuidado, y el aprendizaje depende de eso", dice el director, Chema Prieto
En una semana trágica por el suicidio de Sandra Peña, una menor de 14 años, en Sevilla tras el acoso escolar de varias compañeras, Noticias Cuatro ha estado en el colegio San Gabriel, en el barrio madrileño de Carabanchel, que es pionero contra el bullying. Informa en el vídeo Edurne Arbeloa.
Hace 15 años pusieron en marcha un programa de mediación de conflictos, implicando a profesores y alumnos voluntarios, que demuestra que es posible combatir esta lacra social.
Olivia Pérez, alumna de 4º de la ESO, explica al docente que en su clase ha percibido "un poco de mal ambiente", subrayando que ha detectado "insultos disimulados, como en broma". Como ella, hay otros once alumnos para secundaria.
"Un papel importante en el colegio"
En las reuniones ponen en común lo que perciben. Para ello, el objetivo es "observar y observar", destaca Alfonso Moreno, responsable del programa en un centro especialmente sensibilizado. "Sientes que tienes un papel importante en el colegio, que ayudas a la gente y le sirve para algo", añade Olivia.
En los espacios más íntimos, como son los baños, hay mensajes contra el muro del silencio: 'Si se burlan de un compañero, ¡no te calles!'. El objetivo es ayudarse entre ellos a resolver los conflictos.
"Cuando ya tenemos una solución, ayudamos a crear como una especie de contrato que tienen que firmar las dos partes en donde se ponga qué van a hacer para que esto no vuelva a pasar", señala Andrea Ataun, otra alumna mediadora.
"Yo ya sé que si tengo un conflicto con alguien, a quien recurrir. Ya sé que existe la mediación, y que me puedo sentar en una clase y hacer un círculo de diálogo", afirma Moreno. Ahora ayudan a profesores de otros centros a aprender de su experiencia.
Abren entre cinco y diez protocolos por año
La convivencia es prioritaria y, para ello, tienen hasta un programa de radio. La empatía aquí es una asignatura más. Otra joven mediadora, Candela Pacheco, apunta que "nosotros entre compañeros sí sabemos lo que nos pasa y yo sé cómo puedo ayudar a un compañero que esté triste y quizá una profesora no pueda".
El director del centro San Gabriel, Chema Prieto, asegura que "el clima que se crea en el cole es un clima de atención, de cuidado, de escucha, de habitar este lugar. Eso es muy importante, el aprendizaje depende de eso. Si tú no generas un ambiente de convivencia, no vas a poder hacer que los chicos aprendan".
La mediación no siempre evita los problemas. Cada año, abren entre cinco y diez protocolos por acoso, no les da miedo el estigma. "Es mala prensa, abrir el protocolo es pensar que en mi centro hay violencia y que la gente no está a gusto. Claro, si yo no lo abro, todo esto no sale a la luz", detalla Alfonso Moreno.
Sin embargo, su experiencia demuestra que la conflictividad puede reducirse con la implicación de todos.
